domingo, 2 de abril de 2017

Plagio creativo

Consiste en elegir una obra conocida y cambiar la trama.

Alicia en el país de las Desgracias.

Érase una vez una niña llamada Alicia. Esta niña era muy traviesa y nerviosa. Un día, se encontraba en un centro comercial con unas amigas. Como era tan curiosa, fue a mirar que había bajo las escaleras mecánicas. Se acercó tanto que cayó por una especie de agujero. Alicia estaba confusa y a la vez con mucho miedo. El agujero parecía ser infinito, estuvo dos minutos cayendo. Alicia iba casi a la velocidad de la luz, sin embargo el impacto fue tan suave, como si hubiera caído en una piscina de almohadas.

Cuando Alicia recobró la conciencia, estaba en una especie de refugio subterráneo. Había muchas personas, estaban muy tristes. Ella preguntó porque estaban allí, le respondieron que estaban ahí abajo por los bombardeos. Alicia no sabía que pintaba ella ahí, se asustó. Cuando acabaron esas largas dos horas bajo tierra, salieron a la superficie. Solo había ruinas y mucho humo. Todos estaban derrumbados de dolor. Alicia sin más remedio se unió a ellos, caminaban hacia otra parte mejor. Anduvieron tres días y llegaron a una ciudad aparentemente normal. Parecía una ciudad apacible y familiar pero era todo lo contrario, estaba muy abandonada. No vivía casi nadie. Preguntaron a un anciano que había pasado en esa ciudad. Él les contó que hubo un accidente nuclear hace más de un siglo, por eso la gente no quería volver a sus casas. Ella y el grupo de personas buscaron otra ciudad mejor.

Alicia estaba muy cansada, tanto física como emocionalmente. Se dio cuenta de que en ese mundo siempre era de noche y nunca nadie se reía siempre lloraban. Una tarde le preguntó a una chica de su edad por qué nunca reían. La chica le contestó que para ellos llorar era algo muy común lo hacía casi todos los días, en cambio para ellos el acto de reír se producía muy pocas veces a lo largo del mes. Alicia, aturdida le contó a la chica que para ella era todo lo contrario, reía más que lloraba.

Cuando pasó un año de esto, Alicia cada vez se encontraba peor y deseaba con todas sus ganas volver a su casa. Cada vez lloraba más y reía menos.

Un día en el campo encontró una cueva, entró. Había una especie de escalera, se aventuró a bajar. Ella sin saberlo piso un escalón lleno de agua y resbaló, cayendo por la escalera.

Cuando despertó estaba en el centro comercial, justo debajo de las escaleras mecánicas. Sorprendida se sentó en el suelo y sus amigas fueron a buscarla. No le dolía nada después de esa caída.

Ya en su casa reflexionó y organizó sus propiedades. Pensó lo bien que ella vivía y lo mal que se puede estar. Nunca supo si  esa experiencia fue real, pero entendió que debía mejorar como persona.
Y entendió la siguiente frase: " No te quejes, siempre habrá alguien que este peor que tú".






No hay comentarios:

Publicar un comentario